Tu herida

Por alguna maldita razón siempre termino pensando en ti, siempre imaginándote, siempre esperando que todavía me recuerdes y que en algún momento por fin decidas que quieres saber algo de mi y aunque me duela, contestarte ese mensaje que tanto he estado esperando, no sabes cuánto me dueles todavía y lo profunda que es esa herida que desde el día que te fuiste no logra cicatrizar, tal vez por el resto de mi vida seguirá abierta, tal vez me has marcado de una forma en la que no te imaginas, tal vez ni si quiera me recuerdas, ni si quiera te importo y tú estás haciendo tu vida, triunfando y siendo feliz sin mi y no sabes cuánto me duele pensar en eso, cuanto me duele pensar que no significó nada para ti estar conmigo, que nada de lo que pasamos fue importante y que te da igual así como todo el resto de cosas del mundo te dan igual y yo me quede aquí sola, hecha a un lado, sin nada que me importe, cuando te fuiste me dijiste que estaría bien, pero olvidaste decirme cómo hacerlo, ¿Como voy a estar bien sin ti? ¿Cuántos meses más debo esperar para sentirme bien? ¿Para dejar de llorarte? ¿Para olvidar cuánto me dueles? ¿Cuánto falta? 
De verdad no puedo esperar para poder dejar de pensar en ti y que está herida cicatrice, aunque sea un poco, aunque sea un día tan solo sin recordarte, uno nada más sin llorar por ti, no pido mucho, solo una vez para vivir en paz otra vez.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Quien eres?

Universo alterno #326

Érase una vez el amor, pero tuve que matarlo.