Hubieramos podido.

Pudiéramos cenar con nuestros amigos, entre tanta risa, embriaguez de alegría, pasar de una plática a otra detrás de una infinidad de temas, vernos de reojo en la mesa, pudieras tocar sutilmente mi mano mientras pasa el tiempo y nadie se da cuenta de esos detalles entre tú y yo, pudiéramos pasar noches de estas juntos, vivir en la misma casa, compartir la misma cama, hablar en secreto de comentarios que no podríamos decir en la mesa, que serían guardados solo entre tu y yo, podríamos haber creado una rutina, ofrecerte por la madrugada las opciones para desayunar en la mañana, planear el domingo para pasar el día acostados viendo películas, leyendo libros, incluso salir y hacer algo nuevo aunque yo deteste no tomarme el domingo como día libre, podríamos besarnos infinidad de veces antes de dormir y reírnos de una que otra estupidez que recordaramos que haya sucedido durante el día, mencionarte que me corté mientras cocinaba y que vieras esa pequeña cicatriz que me quedo en el pulgar, podríamos beber hasta marearnos, escuchar las canciones que te presente hace tiempo y aquellas que en vano me dedicaste, podríamos haber formado una vida juntos, una vida diferente a la que tenemos, podría no tener que conformarme a ser infeliz e ignorar tu existencia, podría dejar de preguntarme dónde estarás está noche y dejar de intentar con todas mis fuerzas continuamente olvidarme de ti y el amor inútil que aún te tengo, podría no imaginarme las cenas, los detalles tontos que nadie más ve, los comentarios que se escucharían en la mesa con tu voz que casi deja de sonar en mis recuerdos, podría dejar de intentar adivinar lo que podría sentir si acaso me amarás algun día, podría dejar de pensar en ti y si pudiera todo sería diferente, si pudiera olvidarme de ti, si pudiera lo haría... De verdad que lo haría.

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