El problema es tu voz

¿Sabes que? El verdadero problema de todo esto es que te amo.
No puedo pensar si quiera en decir que tu tienes la culpa por todas las decepciones que me haz causado porque sinceramente siempre supe en que estaba metiendome, siempre supe como eras y aun así me enamore de ti. Después de tantas oportunidades de dejar esto volvimos a continuar en contra de todo y todos porque bueno, tu y yo somos un par de tercos. Neciamente busque las formas de demostrarte cuanto te amaba y con cada palabra te fui queriendo más. Aun te amo y te amare por siempre.
Nunca fui tan fuerte como pensé que era ni tanto como tu pensaste que fui. Probablemente nunca fui nada de lo que pensaste y por eso nos alejamos. Por eso te vas de mi decepcionado igual que yo. A lo mejor no maduramos lo suficiente como pensamos y no somos capaces de poder con esto que sentimos que a veces es mejor hacer un lado e ignorar, por el bien de los dos.
El problema es que aun te amo. Porque no me concentro en olvidarme de ti porque nunca podre olvidarte, porque quiero estar hablando contigo todo el día y sigo esperando un mensaje tuyo o una sola llamada por la madrugada sin avisar, de esas que tanto me encantaban. Porque sigo amando tu forma de ser, tu risa, tus ojos, tu voz, porque siempre supe quien eras y aun así me arriesgue lanzandome a un vacío en la obscuridad amándote. Y así por ahora no hay nada que pueda hacer mas que extrañarte, porque lo hago cada segundo de la existencia de mi ser.
Porque de no ser por las veces en las que suelo respirar podría jurar que no te recuerdo nada.
Y con tus errores, tus distancias, tus silencios, tus juegos, tu sarcasmo, tu dolor, tus sueños frustrados, tus pensamientos sombríos y tu lado obscuro, ese lugar que con cada milímetro de tu ser me hace daño y me intoxica con todo eso en cuenta te amo.
Por eso es que ya no puedo con esto, porque acabara matandome.
Amándote.



Sarah M. Riv.

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