Nos amabamos
Nos amábamos tanto.
A nuestra forma hiriente, punzante, dolorosa y llena de espinas.
Pero nos amábamos tanto.
Con celos, posesión, frases enfermizas, restricciones inusuales, lágrimas y heridas que nos llenábamos de sal para que jamas cicatrizarán.
Nos presionábamos, no nos dejábamos crecer, me aplastabas, pero como nos amábamos.
Nos amábamos tanto mi cielo, sin que existiera forma de ser uno mismo, nos guardábamos los problemas sin solución en un frasco hondo que se lleno para destruirnos, nos comió el fuego, nos ahogo el agua, nos asfixio el aire y los muros esos que construimos a nuestro al rededor para que nadie se metiera se derrumbaron para aplastarnos, fue maravilloso, consumirnos uno al otro, sentir el apagar de tu palpitar y extinguir mi pasión por la vida insignificante.
Creamos un universo hasta el eterno fin del infinito, para dañarnos, para acabarme completa tu compasión, para que me llenaras de lágrimas, nos quisimos a nuestra forma posesiva, hueca, sin vida, dolorosa cariño, eternamente dolorosa, sin manera alguna de poder llamarle amor, sin manera alguna de querernos con inteligencia, con cautela, nos sentimos siempre sin rumbo, desbocados, sin caminos fijos, siguiendo mapas que no conducían a ningún lado, completa y perdidos a medias y dañados.
Nos acabamos y nos seguimos acabando con la fuerza del viento y la ímpetu de nuestro corazón.
Que destruidos cielo mio.
Pero te juro que nadie mas podría entenderlo.
Por dios, de verdad que nos amábamos tanto.
A nuestra forma hiriente, punzante, dolorosa y llena de espinas.
Pero nos amábamos tanto.
Con celos, posesión, frases enfermizas, restricciones inusuales, lágrimas y heridas que nos llenábamos de sal para que jamas cicatrizarán.
Nos presionábamos, no nos dejábamos crecer, me aplastabas, pero como nos amábamos.
Nos amábamos tanto mi cielo, sin que existiera forma de ser uno mismo, nos guardábamos los problemas sin solución en un frasco hondo que se lleno para destruirnos, nos comió el fuego, nos ahogo el agua, nos asfixio el aire y los muros esos que construimos a nuestro al rededor para que nadie se metiera se derrumbaron para aplastarnos, fue maravilloso, consumirnos uno al otro, sentir el apagar de tu palpitar y extinguir mi pasión por la vida insignificante.
Creamos un universo hasta el eterno fin del infinito, para dañarnos, para acabarme completa tu compasión, para que me llenaras de lágrimas, nos quisimos a nuestra forma posesiva, hueca, sin vida, dolorosa cariño, eternamente dolorosa, sin manera alguna de poder llamarle amor, sin manera alguna de querernos con inteligencia, con cautela, nos sentimos siempre sin rumbo, desbocados, sin caminos fijos, siguiendo mapas que no conducían a ningún lado, completa y perdidos a medias y dañados.
Nos acabamos y nos seguimos acabando con la fuerza del viento y la ímpetu de nuestro corazón.
Que destruidos cielo mio.
Pero te juro que nadie mas podría entenderlo.
Por dios, de verdad que nos amábamos tanto.
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